jueves, 28 de octubre de 2010

CRÓNICA PARTIDO FONT DE LA FIGUERA CB – CB AYORA

Jornada 3, Categoría: Segunda Zonal Grupo E
Sábado 23 de octubre de 2010, 17’30 de la tarde, Pabellón Municipal Font de la Figuera
Resultado: 55-46
Parciales: 1 cuarto: 14-11 / 2 cuarto: 16-7
3 cuarto: 10-6 / 4 cuarto: 15-22

Empezaba el día con el cambio del lugar de salida, ya que a última hora nos enteramos de que en la Glorieta también se habían citado los de la plataforma en contra del ATC para ir de concentración a la central nuclear; para que no haya muchos líos, confusiones y/o problemas de tráfico, decidimos (Evaristo y yo) cambiar el punto de quedada: en la gasolinera. Al igual que la temporada anterior y ya que Darío no nos quiere llevar con su avión y el presupuesto del equipo no está como pa echar cobetes, el medio utilizado para los desplazamientos del CB Ayora sigue siendo el de siempre: el coche particular de ca uno; seguimos necesitando del apoyo y ayuda de todas aquellas empresas de Ayora que quieran colaborar así como del Ayuntamiento para poder sacar el proyecto para adelante y que el pueblo pueda seguir contando con un equipo de básquet federado (que no todo en esta vida es fútbol y fútbol).
Como siempre, se me hace un pelín tarde y a eso de las 16’05 paso por la Glorieta camino de la gasolinera comprobando que todo el mundo ha pasado de los sms que Evaristo y yo hemos enviado horas antes cambiando el sitio de salida; allí, parados, de charreta, puedo ver a Carlos, Vicente, Yimi, Gustavo y hasta mi compinche-traidor Evaristo, no sé para que se dicen las cosas! Es que como hemos visto que ya no había nadie… Estamos ya casi todos, falta Darío, que había avisado que acudiría directamente a la Font; Pedro y toda su prole, que vendrán desde Genovés; y Ulises que es más impuntual que los autobuses de la EMT. Al fin aparece y podemos partir con algo de retraso; de todas formas, estamos a poco más de media hora de nuestro destino, por lo que ya habíamos quedado con tiempo suficiente para este tipo de imprevistos.

Llegamos a la Font de la Figuera en torno a las 16’50-17 y nada más entrar en el “polideportivo” (sólo dos vestuarios, sin gradas, sin aseos y sin marcador; eso sí, la chica encargada del mantenimiento fenomenal, atenta, simpática y pendiente de que todo estuviera bien) podemos comprobar que somos afortunados de tener en Ayora el pabellón que tenemos. Nos toca cambiarnos en el gimnasio y hacer el calentamiento en la parte trasera de la pista ya que se está jugando un partido de futbito; esto no merma para nada el ánimo del equipo, al contrario, pues lo más importante y lo que caracteriza a este equipo son las ganas de jugar que llevamos encima y el hecho de que, una temporada más, nos podemos seguir juntando el grupete de amigos los fines de semana para disfrutar del baloncesto.

Al fin acaba el partido de fútbol sala y raudos y veloces (cosa que no hacemos luego jugando) nos dirigimos a la pista para acabar de estirar y empezar con las entradas a canasta. Como los del futbito han terminado tarde, en cuanto nos queremos dar cuenta el árbitro ha pitado los 3 minutos y no nos queda otra que hacer la rueda de tiros libres; pienso que el calentamiento fue algo raro y corto aunque no es excusa pues el equipo rival dispuso del mismo tiempo y espacio. 1 minuto, nos dirigimos hacia el mister para recibir las últimas indicaciones. Gustavo, Pablo A., Carlos, Yimi y Pablo H. quinteto inicial; los nervios y la tensión se hacen notar, esto va a empezar.

Salto inicial y balón para ellos; aún así el primer enceste es nuestro: pase, pase, bloqueo, balón interior, media vuelta y dentro! No empiezan mal las cosas y más aún con la canasta conseguida viendo los centímetros de los hombres altos de la Font y el salto que se gastan algunos de sus integrantes. Va pasando el cuarto con intercambio de canastas por ambas partes y nos empezamos a dar cuenta que este equipo va a ser un hueso duro de roer ya que se les ve muy rodados, con una buena disposición en el campo (sobre todo en defensa ya que cierran muy bien el rebote y apenas lo olemos en ataque), con una presión bastante dura en el pase y cuando recibimos o botamos la pelota y con un acierto en el triple que roza lo indecente (dato: nos colaron tres triples en el primer cuarto -9 ptos de 14- y cuatro en el segundo -12 ptos de 16- lo que hace un total de 7 triples en la primera parte -21 ptos de 30-). Todo esto provoca algo de incertidumbre en nuestras filas y que cometamos más errores de los habituales (sí, más aún); aún así, acabamos el primer cuarto tres puntos abajo (14-11) con la sensación de que se pueden hacer las cosas mejor de lo que se ha visto y de que tendremos que esforzarnos a tope y estar más concentrados que Dinio haciendo un puzzle de dos piezas si queremos sacar algo positivo.

Comienza el segundo cuarto y, definitivamente, es el cuarto gafe, el que se nos suele atragantar en todos los partidos, en el que solemos sufrir la gran pájara cual Perico Delgado en la vuelta del 85; dato: sólo anotamos 7 puntos en este tiempo (un triple, una de dos y dos tiros libres, ole!) por 16 de los de Figuera. Se nos ve agarrotados, nos quema el balón en las manos, apenas hay juego interior, las posiciones de tiro no son cómodas y nos cierran bien el rebote por lo que no hay segundas opciones. Para rematar el cuadro, el árbitro para el partido porque resulta que hay algún lío con las camisetas de algunos: Evaristo lleva el 16 en la suya y en la ficha figura el 6, que es la que lleva puesta Gustavo que a su vez debe de llevar la 11 que es el número que pone en su ficha. Al final se arregla el desaguisao y Evaristo acaba enfundándose la camisetita que hasta ese momento había llevado puesta Gustavo y que, debido a su titánica lucha en la botella con el peaso 5 de la Font, contiene más sudor que la frente de Rocco grabando la escena final de Rocco en el Oeste. Fin del primer tiempo y el marcador refleja un 30 a 18 que escuece menos que la sensación que tenemos de que las cosas no están saliendo bien y que habrá que mejorar en todos los aspectos.
Breve charla en el banquillo con el mister para repasar aspectos del juego con los que no está muy contento por lo visto en la cancha y arengas varias por parte de todos para subir ese ánimo que en ocasiones se nos viene muy rápidamente abajo.
Comienza el tercer cuarto y la vida sigue igual; parcial de 10-6 para ellos y de nuevo atascados en ataque. Lo positivo, que apretamos un poco más en defensa (en líneas generales fue bastante buena a lo largo de todo el encuentro pues conseguimos que se quedaran “sólo” en 55 puntos) que unido a que ellos empiezan a bajar el porcentaje de acierto en el tiro (sobre todo en el de 3) hace que no pasen de los 10 puntos. Aún así, perdemos de 16 y la cosa no pinta bien. Nos conjuramos con nuestro General “Villanueva” Carter para echar el resto y morir con las botas puestas.
Último cuarto de infarto. Parece que por fin quieren entrar. Se suceden las canastas por ambos lados; los ataques predominan sobre las defensas, aunque ellos siguen con la misma intensidad en la anticipación, los marcajes al hombre y el rebote. Reducimos distancias a base de triples: tres seguidos de Pablo H., uno de Carlos y otro estratosférico de Yimi contra tablero nos dejan a 4 puntos quedando 1 minuto, lo imposible parece posible. Pero no sabemos rematar la faena; hacemos faltas rápidas esperando el fallo en los tiros libres pero éstos se conocen el aro y la red al dedillo y no fallan ni una, al contrario que nosotros que erramos tres de los últimos cuatro tiros libres de los que disponemos. Al final dos canastas fáciles de la Font fruto de nuestra precipitación dejan el marcador en el definitivo 55-46.
Conclusiones. Partido duro y raro en el que defendimos mejor que atacamos, con un juego muy embarullao con transiciones y movimientos de pelota muy espesos y atascaos fruto del asfixiante trabajo de los jugadores rivales, lo que nos llevó a no disponer de posiciones cómodas ni claras de tiro, a no tener apenas juego interior y a no conseguir romper su primera línea para penetrar a canasta y/o doblar balones. Lo bueno es que volvimos a tener esa capacidad de reacción que sacamos de vez en cuando y que surgió cuando todo parecía sentenciado (hay que ser regulares a lo largo de todo el partido, no ir a trompicones, y no debemos venirnos abajo en ningún momento); también el cómo defendimos (quitando alguna laguna puntual) ya que conseguimos que un equipo que venía de anotar una media de setenta puntos por partido se quedara en poco más de cincuenta; y, por supuesto, que el ambiente en el equipo sigue siendo fenomenal y que todos seguimos disfrutando de esta renovada aventura baloncentística (Pedro, gracias por volver a perder de tu tiempo con esta cuadrilla de abuelorios).

Por Pablo Abarca Murcia

1 comentario:

  1. Nunca pensé que leer la crónica de un partido de baloncesto pudiese ser tan divertido (y más, con lo poco que me gusta a mi el baloncesto). Pablo, no se a qué te dedicas, pero podrías dedicarte a esto del periodismo deportivo.
    Ánimo para todo el equipo! Qué guay que os hayáis vuelto a juntar.

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