Otro domingo sin siesta... y de resaca del gazpatxo rock

Por segundo fin de semana consecutivo nos tocaba jugar domingo por la tarde. Horario futbolero por excelencia en este país, horario de carrusel deportivo y de tablero deportivo. Pero debe ser que el baloncesto gusta de otros horarios, o por lo menos el CB Ayora. Y lo mismo debió pensar el público, ya que fue casi inexistente, a excepción por supuesto de nuestros más fieles seguidores y seguidoras que ya nos acompañan hasta a los partidos que se juegan lejos de nuestro pabellón. Esto merece reflexión aparte, pero como se agradece jugar en Ayora con nuestra gente, con el buen ambiente que se ha creado, y como se valora cuando vamos por ahí y vemos pabellones vacíos. GRACIAS.

Sólo una cosa más respecto al público, y es que en este partido no estaba ni la peña Yimi; pero claro es que Yimi tampoco estaba. Así que sin nuestro americano (que tiene peñas hasta en pueblos como Ibi), sin Evaristo (todavía lesionado) y sin Mateo, nos fuimos hacia Villena, sin siesta, con la comida todavía llegando al estómago, y olvidándonos de David que se había ido a aparcar. Vaya panda de cabrones que estamos hechos. Eso sí, íbamos con ganas de dar la sorpresa en Villena que me sigue pareciendo uno de los equipos con más oficio en nuestra categoría, aunque este año estén por detrás de nosotros en la clasificación.

Pero bueno vayamos al partido, llegamos a Villena, con el tiempo justito para calentar, pero sin prisas. Deberes hechos, calentamiento completo con frontón incluido, y puntuales como siempre al salto inicial. Por supuesto nos proponemos hacer nuestra única jugada preparada. Y por fin nos salió, Manolo no metió la primera bandeja, pero luchó como un jabato por el rebote de ataque y encestó en el segundo intento.

En estos primeros minutos creo que tuvimos nuestras únicas ventajas en el marcador. El juego era más o menos fluido por parte de ambos equipos y hubo un buen intercambio de canastas, aunque nuestra defensa concedió demasiados tiros relativamente cómodos. Yo con mi torrija, no sabía ni donde tenía el marcador, y es que estaba encima de nuestras cabezas, colgado del techo. Un marcador de los buenos, y yo sin haberlo visto. Final del primer cuarto. Intuyo que vamos igualados con una ligera ventaja para ellos por su mayor acierto en los triples. Y efectivamente así era 19-15.

En el segundo cuarto la tónica por parte del equipo de Villena siguió parecida, pero nosotros nos atascamos en ataque anotando sólo 6 puntos en este cuarto. Ellos siguieron acertados sobre todo desde la línea de 3. Entre el primer y segundo cuarto nos anotaron 5 triples, 4 de ellos del jugador número 7. Por nuestra parte sólo Manolo anotó en una ocasión desde el triple. Como echamos de menos tener alguno de los tiradores más acertados. Resultado del segundo cuarto 14-6, y al descanso 33-21; es decir 12 puntos abajo que nos hacían ver el partido muy cuesta arriba.

Nos vamos al vestuario, nuevas consignas para mejorar sobre todo en defensa y no permitir algunos tiros fáciles que hemos concedido y vuelta a la cancha.
Comienza el tercer cuarto. Primera cuestión, marcaje individual al jugador que nos ha metido 4 triples. Funciona, ya no vuelve a anotar en todo el partido. Les apretamos en defensa, se nota que hemos salido con más intensidad. Y además en ataque no estamos del todo mal. Carlitos sale enchufado anota dos canastas consecutivas, después Gustavo, Manolo, Pablo Abarca y yo mismo. Buena racha de canastas y acabamos el cuarto con 21 puntos. Ellos anotan 14. Así que hemos recortado 7 puntos y estamos sólo 5 por detrás (47-42) en el marcador antes de comenzar el definitivo último cuarto.

Somos optimistas, no nos han hecho canastas con facilidad con el cambio de nuestra defensa, y uno de sus mejores jugadores está con 4 faltas. Empieza el cuarto, se nota la tensión. Vamos intercambiando canastas y la diferencia está siempre entre 3 y 7 puntos en el marcador. Su jugador nº 13 anota dos canastas seguidas, pero responden nuestros pívots Gustavo y Darío, luchadores bajo los tableros. Y llega el momento en que se nos escapa el partido. Dos triples de Villena y lesión de David. Lo vemos claro desde el principio, esguince de tobillo, el cual empieza hincharse como el embutido de la orza. La lesión nos afecta, primero porque vemos jodido a David tumbado en el banquillo con el pie en alto, mientras espera que le traigan hielo; y segundo porque parece que nuestro ánimo decae durante unos minutos al ritmo que se hincha el maltrecho tobillo. Villena se nos escapa en el marcador (61-49) en el minuto 36 de partido. Desde aquí hasta el final algunos ataques rápidos y un poco ya a la desesperada permiten que nos acerquemos en el marcador (61-55 min 38) y hasta el 68-64 del final del partido.

En resumen creo que no hicimos un mal partido, frente a uno de los rivales más fuertes de nuestro grupo, que mueven muy bien la pelota y saben encontrar buenas posiciones de tiro. Seguramente con la defensa que hicimos en la segunda parte y con algo más de acierto en algunos tiros exteriores (ellos metieron 7 triples y nosotros sólo 2) hubiéramos podido hacer algo más. Pero claro a toro pasado es muy fácil decirlo.

Después en el vestuario se entendieron más otras claves del encuentro o mejor dicho de la previa del encuentro. Como dice el título de esta crónica: “otro domingo sin siesta… y de resaca del gazpatxo rock”. Así que como ha comentado el míster nos algunos deben un partido de mvp.

Esperemos que este fin de semana frente a Moixent en Cofrentes, nadie llegue de resaca carnavalera y podamos recuperar el sabor de la victoria.

Mucho ánimo para David y para Evaristo. A ver si estáis pronto en la pista, Evaristo este mismo fin de semana.

Pongo los anotadores que siempre nos gusta: (igual algún punto baila, porque el acta está un poco borrosa

Darío 2 ptos
Ulises 5 ptos
Pablo Abarca 9 ptos
Manolo 16 ptos
Pablo H. 5ptos
Carlos 11 ptos
Gustavo 14 puntos
David 2 ptos

Pablo H.